En horas de la madrugada del viernes 3 de noviembre, se registró un hecho en el cual un joven adolescente recibió un impacto de bala en la zona del abdomen y tuvo que ser hospitalizado. El frente de la Unidad 38 fue baleado en tres ocasiones.
Una balacera registrada durante la noche del jueves 2 de noviembre y la madrugada del viernes 3 generó preocupación en vecinos y efectivos policiales de la Comisaría 38 de Viedma.
Poco antes de las 22 horas del jueves, pasó una moto frente a la Comisaría 38 y se escucharon cinco detonaciones de arma de fuego. Afortunadamente no hubo policías lesionados en ese momento, pero los ataques contra la institución policial se extenderían a lo largo de la madrugada.
En horas de la madrugada, alrededor de la 1.30 volvieron a atentar contra la unidad policial pateando la puerta de la misma y alrededor de las 5.30 un hombre se paró en la esquina de la unidad policial y comenzó a disparar varias detonaciones contra el frente de la comisaría. Afortunadamente no hubo personas afectadas.
También hubo un joven adolescente herido de bala pero al tomar intervención la policía, los familiares no quisieron realizar la denuncia. Se trata de un menor de edad que fue hospitalizado en terapia intensiva con pronostico reservado. Las primeras informaciones indican que ingresó herido alrededor de las 5.30 de la madrugada con al menos un disparo en la zona del abdomen.
Criminalística estuvo en el lugar y relevó al menos 8 detonaciones de las balas disparadas con un calibre 9 milímetros contra el frente de la unidad policial.
