Florencia Velázquez agonizó tres días después de que su novio la rociara con alcohol y la prendiera fuego. Murió el 7 de marzo, en el hospital Municipal Eva Perón de Merlo. Tenía quemaduras de tercer grado en el 80 por ciento del cuerpo.
Florencia, de 23 años, y Leonel Cabral, de 20, vivían con su hijo de tres años en la casa de la familia de ella en Pontevedra, en el partido de Merlo. Los familiares de la chica contaron que el domingo escucharon que la pareja discutía en la habitación. Cuando se abrió la puerta Florencia salió gritando envuelta en llamas. Lograron apagar las llamas con una manguera que había en el patio.
Cabral la trasladó al hospital de Pontevedra y le pidió que dijera que había sido un accidente. El joven quedó detenido acusado de tentativa de homicidio agravado por violencia de género, según el informe publicado en Cosecha Roja.
Florencia fue derivada al hospital de Merlo, donde quedó internada en terapia intensiva. “Llegó con el 80 por ciento del cuerpo quemado. Se hicieron las maniobras de primeros auxilios y se le realizó una intubación porque tenía comprometida la vía aérea superior”, explicó Daniel Capello, director del hospital.
“Los cirujanos plásticos revisaron toda la piel dañada y removieron la que tenía algún signo de infección”, explicó al canal de noticias TN el médico Walter Videtta. Florencia murió en la mañana del miércoles, después de estar tres días en terapia intensiva.
Fuente: Cosecha Roja
