Laura Vinaya: «»Acá murió una madre esperando verdad y justicia y era lo que ellos querían»

Laura Vinaya, prima de Atahualpa Martinez Vinaya contó en el programa El Delitómetro sobre las sensaciones provocadas por haberse archivado la causa que debe investigar a la persona nombrada como el asesino de Atahualpa.

La entrevista de Laura Vinaya en Radio Géminis en el programa El Delitómetro.


«Era la tarea que tenía el Poder Judicial de Río Negro en la figura de Zagari, Falca, de Reussi y de Piccinini. Encontrar al asesino de Atahualpa, un joven de 19 años que fue sacado de un boliche a la vista de varias personas, sin embargo ni la fiscal ni el juez quisieron allanar el lugar donde fue visto por última vez con vida Atahualpa», reflexionó Vinaya.

«Un boliche que era dueño el abogado Celia, que hoy está preso por la causa trata de menores, la causa en la que también quedo preso el juez de Viedma Juan Bernardi. Todas esas cosas que parecen detalles y se fueron conociendo con el tiempo, de quien era amigo de quien y quien cenaba con quien», detalló sobre la trama del Poder Judicial creada para sostenerse a través de la impunidad.

«El asesino de Atahualpa abraza, rie, vive libremente y la verdad que nunca fue la intención de esta familia la venganza, sino la justicia. Quien mata debe cumplir condena para que no lo vuelva a hacer», declaró.

«En los primeros días de haber ocurrido el asesinato recibimos llamados de gente vinculada a la policía para detener las marchas, gente de alto rango.

También recibimos comentarios de gente que no se animó a nunca a declarar diciendo que a Atahualpa lo saca la policía de ahí esa noche y que en el lugar donde fue encontrado Atahualpa la policía solía llevar a los jóvenes para hacerlos «bailar» a modo de tortura», contó Laura sobre los primeros tiempos de la causa hace 13 años atrás.

«Julieta tenía escuchado su teléfono, eso lo supimos durante mucho tiempo», recordó sobre lo vivido y dio detalles de lo sucedido en una ocasión antes y después de una reunión con Aníbal Fernández con dos llamadas telefónicas que nunca pudieron ser rastreadas.

«Nosotras nos sometimos a semejante dolor de ver las fotos reales de Atahualpa asesinado, de las pericias que se habían hecho sobre su cuerpo y encontramos ahí que Daniela Zagari había tenido una campera guardada durante dos años», recordó.

«No se animan a hacer cosas porque cuidan su puesto político. Tienen una sillita y la cuidan. Entonces, así se salvan y así condenan a la sociedad y a las instituciones a ser instituciones de la impunidad».

«Acá murió una madre esperando verdad y justicia, que era lo que ellos querían, porque de esto se trata cuando dilatan en el tiempo, de socavar los cuerpos de los familiares que protestan, para ver si se mueren y si se mueren ya no molestan», fue otra de las frases fuertes de Laura en la nota realizada en www.radiogeminis.com.ar