El 5 de agosto se realizará en General Roca la audiencia de selección de jurados populares para el juicio por el presunto femicidio de Marisa Galdame, ocurrido a finales de octubre de 2023 en Allen.
Las 70 personas que fueron sorteadas como potenciales jurados asistirán el próximo lunes a la Ciudad Judicial de Roca para la audiencia de la que saldrán 12 titulares y cuatro suplentes para el jurado. El juicio oral y público, en tanto, comenzará el 6 de agosto y continuará los días 7 y 8, en el Auditorio roquense. La jueza Verónica Rodríguez será la responsable de dirigir el debate.
La Oficina Judicial de Roca, responsable de la logística de los juicios por jurados, ya notificó a las personas sorteadas, les informó sobre el funcionamiento del sistema y las convocó para la audiencia de selección. El objetivo de esa audiencia es designar un jurado imparcial, diverso y equilibrado en su integración. Eso se logra a través de un proceso de preguntas generales y particulares y mediante la aplicación de filtros, excusaciones y recusaciones específicamente definidos por la ley.
Las personas convocadas a la selección son 35 varones y 35 mujeres que tienen domicilio en distintas localidades de la Segunda Circunscripción Judicial, que abarca desde Allen hasta Río Colorado, y hacia sur Cerro Policía, El Cuy, Sierra Colorada, Los Menucos y Maquinchao.
El caso y las partes
El imputado en el juicio es Pedro Rafael Acuña, quien contará con la defensa particular del abogado Daniel Vergez. El hombre se encuentra detenido con prisión preventiva. La familia de la víctima es parte querellante en el juicio, con la representación del abogado Guillermo Oviedo. En tanto que la acusación pública está a cargo de la fiscal jefa Teresa Giuffrida y la fiscal del caso Laura Olea.
El hecho que se juzgará ocurrió el 30 de octubre de 2023 a la madrugada, en la vivienda que compartía la pareja con sus dos hijos. Marisa Galdame, de 30 años, murió como consecuencia de múltiples puñaladas. El episodio finalizó cuando Acuña se autolesionó con el mismo cuchillo. Una vez recuperado de esas heridas se le imputaron los cargos, que ahora llegan a juicio bajo la calificación legal de “homicidio doblemente agravado por el vínculo de pareja y por ser cometido por un hombre contra una mujer mediando violencia de género (femicidio)”.
