Un hombre que cometió dos hechos delictivos mientras cumplía una suspensión de juicio a prueba fue condenado a la pena de tres años de prisión efectiva al unificarse los seis diferentes delitos cometidos. Estos fueron hurtos y robos, muchos de ellos no llegaron a perpetrarse por lo que se califican en grado de tentativa.
Cabe recordar que la suspensión de juicio a prueba se otorga a quienes cometen delitos cuyas penas previstas por el Código Penal son leves. La misma implica el cumplimiento de pautas de conducta que deben ser respetadas por un lapso de tiempo que, en este caso, había sido concedido, por dos años. No obstante, al incumplir alguna de estas pautas o cometer hechos delictivos en el marco de este beneficio, se revoca el mismo a pedido de la acusación.
Esta situación se produjo durante esta semana, en la que un hombre de 27 años cometió dos hechos de robo mientras cumplía este beneficio, que fue entonces revocado. Por lo mismo se realizaron sendas audiencias judiciales que concluyeron con la condena de tres años de prisión efectiva por todos los hechos.
En la primera de ellas, la Fiscal adjunta Paula de Luque explicó que para unificar los hechos cometidos y requerir una pena debía primero revocarse la suspensión de juicio a prueba. En la instancia el imputado renunció a tal beneficio y ello fue admitido por el Juez de Garantías, Ignacio Gandolfi.
Minutos después, ante el Juez de juicio Marcelo Chironi, la misma funcionaria fiscal detalló los hechos de hurto y robo cometidos por el hombre, algunos en grado de tentativa. De Luque se comunicó con las víctimas de los hechos a quienes les explicó cuál sería la resolución de tales instancias, adelantándoles que pediría una condena efectiva para el acusado.
Asi lo hizo, con acuerdo de la defensa particular ejercida por Angel Curzi. Tal requerimiento fue admitido por el Juez Chironi quien condenó al hombre a tres años de prisión efectiva, luego de que éste admitiera haber cometido tales delitos.
