Nuevo tiroteo en la madrugada del martes en Viedma

Las balas se volvieron una rutina
Las balas se volvieron una rutina

 

En la madrugada del martes se registró un fuerte tiroteo en inmediaciones a los barrios Lavalle y 22 de Abril. Vecinos aseguran que se escucharon más de 20 detonaciones.

La información a la que accedió este medio extra oficialmente indica que todo comenzó alrededor de las 4 de la madrugada en el barrio San Martín donde se originó un robo en una propiedad. Al tomar conocimiento la policía y dirigirse al lugar comenzó una persecución con los delincuentes que escapaban con elementos robados.

La situación se extendió hasta el barrio Lavalle donde la policía alcanzó a un joven que presuntamente participó del robo. Se trata de un menor de edad con serios problemas policiales y judiciales. Pero la demora no fue sencilla ya que se produjo un altercado con otras personas que pretendieron evitar el accionar de la policía.

Según relataron a este medio fuentes policiales, mientras los uniformados que llegaron al lugar en un móvil policial hacían su trabajo, un grupo de personas pasó por el lugar en un auto y baleó a los efectivos que inmediatamente se pusieron a resguardo y alcanzaron a subir al móvil que salió raudamente de la zona. Pero un policía no alcanzó a subirse y quedo a una distancia de 100 metros. Cuando pretendió llegar al móvil un grupo de jóvenes se interpuso y comenzó a dispararle. Afortunadamente ninguna de las balas dio en la humanidad del policía que salió entero de esa situación.

La versión fue contada por fuentes policiales que ponen el cuerpo en cada intervención en la cual se registran habitualmente este tipo de tiroteos en la ciudad sin que nadie, ni desde justicia y tampoco el ministerio de Seguridad se expresen o den a conocer acciones que al menos le lleven tranquilidad a la comunidad de que algo se está haciendo.

Lamentablemente los disparos se repican una y otra vez en medio de la impunidad de quienes aprietan cada gatillo y de la falta de celeridad de quienes deben investigar y accionar contra esas personas para que de una vez paguen por los delitos cometidos. Mientras tanto, en el medio están las personas que lo padecen como los policías que ponen el cuerpo y la gente que teme que le maten un familiar con alguna bala perdida.

Al respecto, el Jefe de la Regional Primera, José Rush contó a este medio que hay dos causas en proceso que pretenden llegar a las personas que disparan las armas desde hace más de un mes y medio.