El suelo del frigorífico estaba grasoso y resbaladizo. Un trabajador, como todos los días, llevaba un carro repleto de menudencias con gran esfuerzo, subiendo por un piso en pendiente, cuando patinó y cayó. Por el plano inclinado, el pesado carro retrocedió y le golpeó la rodilla derecha. Por el dolor, no pudo finalizar la jornada laboral.
Tras el tratamiento y una intervención quirúrgica, la Comisión Médica de la ART diagnosticó que el trabajador había quedado con una incapacidad laboral del 4 por ciento. Pero el trabajador ponderó un porcentaje mayor, por lo que inició una demanda para que se le reconozca.
En el expediente intervino una perita, que concluyó: el trabajador “padeció un traumatismo en su rodilla derecha mientras cumplía sus tareas laborales. Este traumatismo requirió atención médica y quirúrgica, además de rehabilitación por de su ART. Se diagnosticó una rotura del cuerno anterior y cuerpo del menisco externo, lo cual generó las secuelas descritas en el examen físico”.
Finalmente, explicó que la incapacidad era algo mayor a la dictaminada por la Comisión Médica, pero inferior a la solicitada por el trabajador.
Con la prueba generada, la Cámara Laboral de Viedma condenó a La Segunda A.R.T. S.A. a indemnizar al trabajador por por el porcentaje de incapacidad laboral reconocida.
