Actualmente, más de 240 jóvenes de entre 16 y 30 años forman parte del programa «Oportunidades desde el barrio», que se desarrolla en barrios de toda la provincia con el objetivo de integrar a personas en situación de vulnerabilidad socio penal.
Para esto, el programa que es llevado a cabo por la Subsecretaría de Prevención del Delito y Participación Comunitaria, dependiente del Ministerio de Seguridad y Justicia, desarrolla actividades de formación, inserción laboral y fortalecimiento familiar.
Con programas como este, se ha logrado reducir significativamente la violencia en los barrios, aumentando las posibilidades de reinserción social de los jóvenes.
Al respecto, en la delegación Zona Atlántica, desde el segundo semestre de 2018 hasta diciembre pasado, se desplegaron cuatro dispositivos que incluyeron cinco talleres socio laborales en temáticas como manipulación de alimentos, electricidad, eco-construcción, construcción en seco y boxeo social y recreativo.
De esta manera, se abordó a más de 130 jóvenes entre los cuales se evidenció cómo se ha modificado sustancialmente su relación con la violencia y el delito, internalizando valores, pautas y disciplinas vinculadas con el mundo del trabajo, mediante su contención grupal e individual.
Estos talleres son producto del trabajo articulado e interagencial, de reuniones entre diversos organismos provinciales, municipios, iglesias y diversas organizaciones de la sociedad civil.
En Viedma, en el receso de verano, se continúa con actividades deportivas en los barrios Loteo Silva y Lavalle, con jóvenes de diversos sectores que concurren a los talleres de Boxeo Social y Recreativo.
Estas actividades se complementan con talleres sociolaborales para el aprendizaje de oficios de electricidad y construcción en seco, de los cuales participan de 30 a 35 personas en cada uno de ellos.
En la delegación de Alto Valle Este, entre 2018 y 2019 se desarrollaron diversos dispositivos sociolaborales en la modalidad de talleres como: reparación de Smartphone nivel 1, metalúrgica, electricidad domiciliaria, así como la implementación del dispositivo actividad física saludable y recreativa.
En los próximos días, se retomarán las actividades a partir de la evaluación técnica y la planificación realizada por los equipos técnicos de la Subsecretaría.
En el caso de la delegación Alto Valle Oeste se trabajó en dos dispositivos, uno en un barrio y el otro en un contexto de encierro, donde se implementaron los talleres de rugby y derechos, en el cual, se desarrollaron estrategias preventivo-promocionales brindando contención temporal a adolescentes y jóvenes en situación de vulnerabilidad psicosocial y socio-penal.
También se llevó a cabo el taller de Ciclomecánica, una propuesta pedagógica-laboral destinada a personas que se encuentran en una comunidad terapéutica para el reciclaje de bicicletas. Las actividades con nuevos dispositivos retornarán en el mes de febrero.
En cuanto a la delegación de Zona Cordillerana, en Bariloche y en conjunto con el Municipio y organismos provinciales, se trabajó con tres grupos distintos, convocados en torno a las propuestas de formación en torno a: Panificación, Herrería, y Mantenimiento General.
En estos meses se continúa con el acompañamiento a los diversos grupos de jóvenes, trabajando la integración y la grupalidad a través de diversas actividades, tales como: la muestra de cortos, espacios de cocina y encuentro de elaboración de pizzas y salidas recreativas.
Todas estas actividades han sido generadas partiendo de las necesidades e inquietudes de los propios jóvenes y la articulación y el trabajo con diversos organismos provinciales.