Escrachar por redes sociales puede ser condenado penalmente

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Es muy común que las personas opten por nombrar a alguien acusado de un delito en las redes sociales antes que realizar la denuncia. La metodología del escrache da sensación de justicia social, pero se puede incurrir en un delito.

Compartir en las redes sociales una denuncia contra una persona, publicar su nombre o su imagen acusándola de algún delito conlleva una responsabilidad civil y penal.

Las denuncias de este tipo se han convertido en una práctica muy difundida en las redes. Supuestos violadores, padres violentos, infractores de tránsito, maltratadores de animales y hasta ladrones son los blancos favoritos.

Gentle ladies’ gym, stretching, strength, coordination, balance and bodybuilding, from 18 years old – lancy tuttisports 2019 ultima t3 fitness and bodybuilding accessories – buy cheap – go sport.En todos los casos es interpretada por los usuarios como una forma de ejercer una «justicia ciudadana». Distintos especialistas en derecho civil, en delitos informáticos y en calumnias e injurias coincidieron en que quien comparte denuncias infundadas contra terceros en redes sociales deberá responder por los daños generados.

Sin embargo, hubo matices acerca de si era correcto puntualizar en un usuario determinado, en aquel que originó la información, o en toda la cadena de usuarios.

Por mes se abren 180 causas penales, en el intercambio de información, datos filiatorios, fotografías y videos a través de Facebook, según denunció la ONG Defendamos la República Argentina. En un fallo de la justicia de la ciudad de Buenos Aires se condenó a una mujer a realizar 150 horas de tareas comunitarias por “calumniar e injuriar” a un hombre a través de las redes sociales.

El delito por calumnias e injurias está tipificado en los artículos 109 y 110 del Código Penal, pero nunca había sido aplicado en la Argentina para agravios vertidos en las redes sociales. ante la audiencia “se hizo alusión que hay que tomar conciencia de que acusar falsamente a una persona de la comisión de un delito en las redes sociales, en este caso Twitter, es un hecho grave que causa un gran daño en lo personal y profesional a una persona y que la justicia no puede permitir que estos hechos sigan sucediendo y que no tengan consecuencias”.

Un caso local

En Carmen de Patagones sucedió un caso en particular donde mucha gente escrachó a una persona acusándolo de haberse masturbado frente a un colegio. La versión llegó a algunos medios de comunicación radiales y estos dieron a conocer datos de la patente de la persona que aseguró no tener nada que ver con la acusación.

La persona difamada consultó con una abogada en Viedma y comenzaron a enviar cartas documentos a las personas que virilizaban mediante redes sociales o daban a conocer datos de quién creían que era el sospechoso. La patente, la dirección y el nombre trascendieron en muchos ámbitos perjudicando notablemente al nombrado quien estaba a punto de entrar a trabajar en un importante lugar y no fue así.

Ahora, todo es una cuestión legal contra quienes iniciaron los escraches vía redes sociales y en los medios de comunicación a quienes también podría caerles una penalización, ya que directivos del colegio en cuestión denunciaron y aportaron las capturas de pantalla con la información dada por un conocido medio radial de Carmen de Patagones.

 

Fuente: ONG Defendamos la República Argentina.