En horas de la mañana de este viernes 31 de enero, aproximadamente a las 10:50, se registró un “hurto en grado de flagrancia” en una iglesia cristiana ubicada en la intersección de Avenida Bucchino y calle Piquillines de la localidad de Playas Doradas.
Según el informe policial, un oficial de guardia, mientras se encontraba en la puerta de ingreso de la Unidad policial, observó a un hombre ingresar al templo, cuyas puertas permanecían abiertas al público. Minutos después, fue visto saliendo del lugar con el rostro cubierto por una capucha y portando varios objetos que llevaba consigo.
El sujeto se dirigió hacia calle Piquillines, lo que motivó la intervención inmediata del personal policial.
Posteriormente, el personal se entrevistó con el sacerdote de la iglesia quien confirmó la sustracción de un caloventor color gris, un caloventor color blanco, un cartel luminoso y un rollo de cable. Todos estos objetos fueron identificados como pertenecientes al templo.
Gracias a la rápida acción policial, se logró la aprehensión del sospechoso en calle Piquillines N° 420. El ladrón, es un hombre de 39 años, desempleado y con domicilio en el barrio La Loma, de Sierra Grande.
En el momento de su detención, se procedió al secuestro de los elementos sustraídos entro los que estaba el rollo de cable que tenía una etiqueta con el nombre del sacerdote al que le robó. Personal de Criminalística intervino en el lugar para realizar las pericias correspondientes.
Se dio intervención a la Fiscalía de turno en Viedma, a cargo de Paula Fransen, quien dispuso la aprehensión del sospechoso y el secuestro de los elementos sustraídos. También se solicitó la verificación de antecedentes del detenido.
