Luego de revisar las cámaras de seguridad de la zona donde ocurrió el accidente que terminó con la vida de un motociclista, la justicia pudo tener más claridad en la investigación que había arrojado como trascendido que se buscaba al conductor de un auto que había atropellado al hombre de 35 años.
Al verificar las cámaras de seguridad de la zona, se pudo determinar que el tercer auto que se presumía estaba en fugo no atropelló al motociclista, ya que pasó por al lado sin siquiera tocarlo, pero tampoco detuvo la marcha para auxiliar al joven de 35 años que perdió la vida, maniobra que en el momento desorientó a las personas que se encontraban cerca del lugar.
Para la justicia, en base a lo visto en las filmaciones, la muerte del motociclista se dio por su exclusiva responsabilidad ya que al momento del accidente no tenía el casco colocado y una maniobra de contacto contra el primer auto involucrado, que fue secuestrado, hizo que perdiese el control de la moto y caiga de cabeza al suelo. El golpe en el asfalto fue lo que mató al conductor de la moto.
Toda la información y pruebas de vídeos fueron mostradas a los familiares del motociclista a quienes se les consultó si querían que la investigación avance para dar con el conductor del otro vehículo, ya que si bien se comprobó que no estuvo directamente involucrado llamó la atención que nunca detuvo la marcha. La familia no quiso que la investigación avance, ya que entendieron que no había nada que hacer respecto a responsabilidades y solo pretendieron les entreguen el cuerpo para despedirlo en el velorio y cremarlo, según precisaron fuentes judiciales a este medio.
Lo cierto, es que, en la jornada del miércoles por la tarde, al comunicarse sobre el accidente se buscaba un vehículo presuntamente involucrado. Tras verificar que no hubo participación y delito y desestimar las actuaciones desde la propia familia, para la justicia, la causa quedo en una muerte por accidente.
