Causa Atahualpa: declaró el testigo que vio a dos de los acusados en Miloka

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El lunes declararon tres testigos de la fiscalía y la querella. Una persona que vio a dos de los acusados en el boliche Miloka, un amigo de la víctima y el hombre que encontró su cuerpo.

Felipe Carrasco, Melisa Fernandez Barrientos y Carlos Morales Toledo están siendo juzgados como presuntos coautores del homicidio de Atahualpa Martinez Vinaya ocurrido el 15 de junio de 2008 entre las 4.30 y las 9 de la mañana.

Un primer juicio realizado en el año 2014 los había sobreseído pero la sentencia volvió atrás cuando el Superior Tribunal de Justicia (STJ) revisó el caso y ordenó anular todo lo actuado. El segundo juicio tiene a los mismos imputados y una selección de unos 40 testigos que dieron su testimonio en el primero. Durante las primeras cinco audiencias de este segundo juicio, hubo varios aspectos salientes.

El imputado Carrasco fue el único que pidió declarar y aceptó responder preguntas de la fiscalía y la querella, a pesar de la recomendación de su defensora. Entre otras cosas que dijo, el hombre negó conocer previamente a los otros dos imputados y a la víctima, apuntó hacia la Policía de Río Negro y afirmó ser «inocente».

Hasta el momento hubo 4 testigos que estuvieron ausentes y serían convocados en las próximas audiencias. Los olvidos y la falta de precisión estuvieron presentes en la mayoría de los testimonios y hubo un caso sobresaliente que terminó con la detención de un testigo de identidad reservada por falso testimonio.

Por otra parte, la querella pidió que se cite a declarar en calidad de testigo a uno de los dueños del bar Miloka, donde Atahualpa fue visto con vida, por última vez. Se trata del abogado Rubén Sella. Sella cumple prisión efectiva por el caso de corrupción de menores en la que también fue condenado uno de los jueces del primer juicio, Juan Antonio Bernardi.

Este lunes, hubo tres testimonios: un hombre que vio cuando Morales Toledo y a Barrientos se retiraron del bar Miloka después que Atahualpa, el amigo del joven que llegó al lugar con él y el hombre que encontró su cuerpo.

Consultada por VDM Noticias, la representante de la familia, Julia Mosquera, relativizó los olvidos en los testimonios y planteó que «cuando hay un hecho tan trágico como el asesinato de un joven, seas o no conocido de Atahualpa, genera un impacto y es difícil que a los testigos se les olviden determinadas cuestiones».

Por otra parte, en referencia al señalamiento de la Policía de Río Negro recordó que «Julieta viene diciendo que la policía ha tenido que ver, que el poder judicial ha tenido que ver y que existe un entramado de corrupción».

«Como abogada de la familia no lo puedo desconocer. Hoy por hoy no está en juego. No sé cómo puede ser un desenlace del juicio. Es una realidad y Julieta la ha denunciado. Alrededor del asesinato de Atahualpa hay un montón más. Hablar de Atahualpa, lo decía Julieta siempre, es hablar de la droga, de la prostitución, de la trata… De todo lo que se mueve en los barrios y de todo lo que se olvidan que sucede en los barrios», añadió.

Las audiencias continúan este martes a las 12 del mediodía. Se realizan los lunes y viernes a partir de las 9 AM y los martes y jueves, a partir de las 12.

 

El caso

La autopsia del Cuerpo Médico Forense estableció que Atahualpa recibió un disparo de arma de fuego, «presumiblemente calibre 22», en la «región axilar posterior izquierda sin orificio de salida que le perforó el lóbulo superior del pulmón atravesando el tórax». La agresión habría sido efectuada a una distancia «mayor a los 50 centímetros» y le ocasionó una hemorragia con shock hipovolémico que le produjo la muerte.

Según la acusación, Carrasco, Morales Toledo y Fernández Barrientos, abandonaron el cuerpo «a unos 500 metros de la avenida Perón», en el camino vecinal que nace detrás de la Planta Transformadora de Electricidad y va en dirección al Penal 1 y al Autódromo de Viedma.

 

Información de VDM Noticias


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