Un operativo de control vehicular, llevado a cabo por personal de Seguridad Vial de la Policía de Río Negro en la localidad de Chichinales, culminó con el secuestro de un automóvil que presentaba múltiples irregularidades.
El procedimiento se desencadenó sobre la Ruta Nacional 22 cuando los uniformados apostados en el puesto de control observaron una maniobra sospechosa por parte del conductor del rodado, quien intentó eludir la fiscalización. Esta actitud motivó una breve persecución que finalizó a pocos metros, logrando los efectivos detener la marcha del vehículo.
Al solicitar la documentación pertinente al conductor, los policías constataron la ausencia total de la misma. Asimismo, al proceder a la verificación del rodado, se detectaron anomalías significativas en la impresión numérica de los números de motor y chasis, lo que imposibilitó su correcta identificación.
Ante la gravedad de las irregularidades detectadas, se dio intervención inmediata a la Fiscalía en turno. La autoridad judicial dispuso el secuestro preventivo del automóvil y el inicio de las actuaciones legales correspondientes para determinar la procedencia del vehículo y las responsabilidades del conductor.