Le quedaban 12 días para quedar libre. Ahora deberá seguir en prisión.
Los beneficios a los delincuentes siguen sobre el tapete. Esta vez, un peligroso ladrón que estaba preso en la cárcel cipoleña aprovechó una salida transitoria para ingresar a robar a una casa de familia en Allen. Sin embargo, el dueño del inmueble logró reducirlo y le propinó una brutal golpiza.
Fuentes policiales confirmaron que el dueño lo encontró in fraganti y le dio una paliza para evitar que se diera a la fuga, razón por la cual presentaba algunos golpes en diferentes partes del cuerpo al momento de llegar a la dependencia policial.
El jefe de la Comisaría 33 de Allen, Aldo Pelagatti, explicó a LM Cipolletti que el hombre estaba cumpliendo una pena unificada de 8 años de prisión por diferentes hechos delictivos, como robo y atentado contra la autoridad. Si bien en un primer momento se difundió que había sido autor de un homicidio, la información fue desmentida por las autoridades de las fuerzas de seguridad rionegrinas.
Fuentes judiciales confirmaron que el apellido del interno es Álvarez y que le quedaban tan sólo 12 días para agotar su condena y salir en libertad. Ahora, sin embargo, deberá seguir un tiempo más a la sombra.
“El robo ocurrió ayer (por el domingo) a las 16, en el barrio Norte de Allen y fue descubierto por la propietaria del inmueble. Minutos después intervino el dueño, tuvo un cruce con el ladrón, forcejearon y le dio algunos golpes. Ahora se encuentra detenido en la dependencia policial y volverá a ser trasladado al penal cipoleño”, confirmó el comisario.
A su vez, Pelagatti señaló que el recluso había cometido robos y protagonizado varios altercados tanto en Allen como en J. J. Gómez y General Roca.
Debate por presos con beneficios
El crimen de Joaquín Vinez reabrió el debate en torno a los beneficios que se les otorga a los delincuentes. En este caso, el supuesto asesino estaba preso, pero le habían otorgado la libertad condicional.
LMC
