A 16 años del crimen de Atahualpa hubo una intervención frente al Poder Judicial

 

En la previa al cumplirse 16 años del asesinato de Atahualpa Martínez Vinaya se realizó este viernes 14 de junio, en las puertas del Poder Judicial de Viedma un acto recordatorio de la causa evidenciando la responsabilidad judicial para que el caso siga impune después de tanto tiempo.

Ricardo Vinaya fue quien se dirigió a los presentes y dijo “venimos a este lugar que alguna vez quizá, alguna generación nueva pueda dar un vuelco en lo que representaría para el pueblo. Este Poder Judicial en el que están jueces y fiscales, quién los elige, de qué manera, alguien sabe, la gran mayoría creo que no”, referencia.

Vinaya también señaló sobre el Consejo de la Magistratura y se preguntó “quién los elige, quien sabe cómo funciona. Si ahora salimos a la calle y le preguntamos a 100 personas qué significa el Consejo de la Magistratura es muy probable que no sepan”, referenció.

“Hay una impunidad generalizada para manejar y decidir a antojo de ellos”, dijo Vinaya quien aclaró que “el Consejo de la Magistratura destituyó a un juez llamado Igoldi. Ese juez, encontró irregularidades dentro del poder político ligado con el poder judicial y no les gustaba que salieran muchas irregularidades. Qué hicieron, el Consejo de la Magistratura se reúne con representantes legislativos, del Colegio de Abogados, del Poder Judicial y decidieron destituirlo en un mes”, explicó y ejemplificó con el pedido de Julieta Vinaya que pidió que destituyeran a Zagari, Reussi y Falca en ese ámbito por las irregularidades comprobadas en el ámbito legislativo. Pasaron más de 6 años y no pasó nada, cuando muere Julieta hacen otra parodia de ese juicio y concluyeron en dos meses de inhabilitación a la jueza Zagari, un tirón de orejas, esta es la justicia que tenemos para pocos”, remarcó Ricardo Vinaya.

Luego, leyó un comunicado a todos los medios de prensa presente y expresó que “en este palacio judicial están los jueces y juezas cuyos sueldos significan millones para el Estado al que toda la población contribuye. Con la nuestra sostienen sus vidas de privilegios y las faltas graves que cometen”.

“Jamás se pronuncian a favor de los que menos tienen, no cuidan a los estudiantes cuando hacen oídos sordos a los grandes desfinanciamientos que sufren las universidades y la educación pública en general”, remarcó.

“No cuidan a la ciudadanía que se ha jubilado cuando se le sigue postergando bajo premisas de ajustes fiscales necesarios. No cuidan a la gente que sufre enfermedades complejas o que tiene una situación de discapacidad”.

“Cuando liberan los precios para medicamentos o cuando retiran las asistencias, no cuidan a las poblaciones alejadas de los centros cuando irrestrictamente se aumentan los servicios y el combustible. Cuando cierran dependencias de correos, ANSES o PAMI, quienes juran garantizar el respeto a la Constitución Nacional”.

“Quienes cobran por esa alta responsabilidad, permanecen como muertos vivos frente al avasallamiento de todos los derechos que asisten a cada hermano y hermana de cada pueblo”.

“Estos jueces que cobran 10 millones al mes no ven, no oyen, no escuchan, no siente, son unos muertos vivos que permanecen en el tiempo y a quienes jamás les llega el hambre, ni la angustia, ni la enfermedad a la que permiten someter a las mayorías”.