Alrededor de las 07.30 de la mañana del jueves 31 de octubre, efectivos policiales encontraron una moto abandonada. Al cruzar datos certificaron que había sido robada horas antes.
Efectivos de la Unidad 34 que realizaban recorridas preventivas por el barrio Ceferino de Viedma, caminaban por la zona de la escuela primaria cuando observaron una moto apoyada contra un paredón y parecía haber sido abandonada.
Al acercarse verificaron que se trataba de una moto Yamaha color negra y blanca con el sistema de arranque roto y algunos cables a la vista. También tenía el guardabarros delantero y plásticos de la parte trasera y la tapa de nafta rotos, por lo que todo indicaba que se trataba de una moto robada.
Al cruzar los datos de la chapa patente que tenía la moto pudieron confirmar que había sido sustraída en horas de la noche a un hombre de 31 años, por lo que fue secuestrada y se notificó a la fiscalía de turno.