En el marco de un proceso penal tres hombres fueron condenados por robar distintos elementos de una escuela de Catriel. Utilizaron un automóvil para escapar y como parte de la sentencia se decomisó el vehículo disponiendo que se entregue a la institución que el Ministerio de Seguridad disponga.
En la madrugada del 12 de marzo de 2021, tres hombres ingresaron a una escuela primaria ubicada en calle España de Catriel saltando un paredón y ya en el interior del establecimiento educativo, sustrajeron una bomba centrífuga.
Gracias a la alerta que dio un integrante de la policía local, personal de la Comisaría Novena pudo localizar a los sospechosos que se dieron a la fuga de la institución educativa a bordo de un automóvil Renault Clio, siendo detenidos en inmediaciones de Mosconi y Añatuya. Tras realizar la requisa vehicular, se recuperó del interior del rodado la bomba y algunas herramientas que se sospecha fueron utilizadas para desconectarla.
Ese mismo día pero por la tarde, la fiscalía solicitó un allanamiento en la vivienda de dos de los imputados. En ese diligencia se procedió al secuestro de elementos de limpieza, de librería, una computadora y una impresora que eran pertenecientes a la supervisión de nivel primario de Catriel que había sido denunciados el día anterior al hecho el 11 de marzo de 2021.
Dos de los imputados aceptaron su responsabilidad en el hecho, por lo que se procedió a declararlos culpables en un procedimiento abreviado parcial por los delitos de robo en poblado y en banda y encubrimiento agravado por el ánimo de lucro. Como sucede en este tipo de casos, la pena debía fijarse en una audiencia de cesura, donde la principal discusión se centró en el decomiso del automóvil involucrado en el hecho.
El Código Penal de Nación contempla en el artículo 23 que recaerán en decomiso “las cosas que han servido para cometer el hecho (…) en favor del Estado nacional, de las provincias o de la municipios”. Sobre este punto, los representantes del Ministerio Público Fiscal sostuvieron que además de una pena de ejecución condicional, debía aplicarse la pena accesoria puesto que el auto había sido utilizado para escapar y para trasladar la bomba centrífuga, elemento que había sido robado.
La defensa por su parte, sostuvo que el automóvil era el medio de transporte que el hombre utilizaba para trabajar y en contraprestación ofreció mano de obra gratuita por parte del hombre para realizar los trabajos de albañilería que se le indiquen. Sin perjuicio de lo anterior, durante la audiencia se expuso que en la actualidad el hombre viaja en trasnporte público o a dedo porque el automóvil está en un taller de reparaciones.
La Jueza de Juicio al momento de dictar sentencia, explicó que “en la doctrina se define el ‘decomiso’ o ‘comiso’ como una pena patrimonial accesoria que consiste en la pérdida de los instrumentos y efectos del delito a favor del Estado”. Agregó que “tal vez sería más cómodo para el imputado desplazarse en su propio vehículo, pero lo cierto es que lo alegado en pos de que el Tribunal no se pronuncie en favor de la aplicación de la pena accesoria no resulta suficiente ni ajustado a derecho”.
Por lo anterior, además de dictar una condena a tres años de prisión condicional, dispuso que Renault Clio sea decomisado y que sea puesto a disposición del Ministerio de Seguridad una vez que el fallo quede firme.
Cabe señalar que el tercer imputado también fue condenado a una pena de tres años ejecución condicional en un procedimiento abreviado pleno.