La Red Social de los barrios Lavalle, Mi Bandera, 30 de Marzo y Nehuén quiere expresar su profunda preocupación por el estado de vulnerabilidad y desamparo en el que se encuentran muchos niños, adolescentes y familias de nuestra comunidad ante la falta de políticas públicas preventivo-promocionales específicamente en torno a la problemática del uso, abuso y consumo de sustancias toxicas.
Por otro lado, expresamos nuestra mayor solidaridad con los trabajadores y familias usuarias del Centro de Intervención Sociocomunitario (CISC) «La Parada». Desde el año 2006, esta Red Social ha denunciado la realidad que atraviesan lxs jóvenes de esta Comunidad vulnerada, la que se profundiza día a día en el actual escenario sociopolítico, destacando la necesidad de Políticas Públicas que los promuevan como sujetos de derechos y que contribuyan a la construcción de valoraciones positivas, respecto a las propias capacidades de los jóvenes y sus lazos sociales. Este es el compromiso de los trabajadores, el que albergo a familias que atraviesan una problemática tan compleja. Ante el desmantelamiento de dispositivos sociocomunitarios como el CISC, exigimos a las autoridades de Salud y SeNAF que busquen los canales necesarios para que los operadores sociocomunitarios en Adicciones sigan trabajando esta problemática desde los marcos teóricos y prácticos en los cuales fueron formados, esto significa trabajar enmarcados en un abordaje preventivo promocional comunitario desde la reducción del daño.
Sería importante que desde estos organismos de gobierno escuchen la voz de los trabajadores que tienen una trayectoria y experiencia que no solo cuenta con el trabajo específico con usuarios y sus familias, sino que también han dado importancia a la capacitación en la temática y trabajos en las escuelas de la ciudad. Tener en cuenta estos conocimientos ayudará a dar una mejor respuesta a la sociedad que exige políticas entorno a la problemática de los consumos. Como Red queremos resaltar que este era el único dispositivo en la ciudad de Viedma y que el otro dispositivo CISC que funcionaba en Bariloche a poco de andar fue desarmado. Ambos fueron creados como consecuencia de las demandas de la sociedad a nivel provincial luego del asesinato de jóvenes en las ciudades de Bariloche y Viedma.
Hoy la actual situación de crisis económica y social que vemos se profundidad día a día y requiere con mayor urgencia el trabajo intersectorial e interdisciplinar articulado para dar respuesta a las situaciones complejas.