Un empresario del sector taxista manifestó su disgusto por una situación vivida en la jornada del viernes donde uno de los móviles de la flota de su empresa terminó con la luneta rota en las puertas de un local nocturno y nadie se hizo cargo del arreglo.
Se trata de Daniel Villarreal, a cargo de la empresa 23 Mil de Viedma quien manifestó a este medio la impotencia por la situación sucedida en la madrugada del viernes, donde uno de los vehículos que pertenece a la flota de taxis de la empresa sufrió la rotura de la luneta producto de un botellazo cuando estaba parado en el semáforo y asegura que nadie se hizo cargo del daño ocasionado.
Producto de la bronca, Villarreal adelanto que hoy se dirigirá a dialogar con funcionarios municipales de Viedma para ver qué tan permitida está la instalación de ese local nocturno ubicado en 25 de Mayo y Sarmiento de Viedma, en el radio de la parte céntrica de Viedma.
“En ese lugar le robaron el arma a una policía, se vende droga y siempre hay menores tomando alcohol y nadie controla nada”, remarcó el damnificado dejando en claro que hoy iniciará gestiones para saber bajo que reglamentación trabaja ese comercio y buscará que clausuren sus puertas.
