Confirman prisión preventiva a imputado por homicidio ocurrido en Allen

El juez de revisión de Roca Daniel Tobares confirmó la prisión preventiva por el plazo de 6 meses que pesa sobre el hombre imputado como presunto coautor del homicidio de César Wenseslao Manriquez Figueroa, ocurrido en Allen la tarde del pasado 28 de junio.

En la audiencia realizada el viernes, el defensor particular del imputado solicitó que se revoque la prisión preventiva que pesa sobre su asistido, Ramón Segundo Ramírez Quezada. Aquella medida había sido dispuesta el pasado 30 de junio por el Juez de Garantías Gustavo Quelín, en la audiencia de formulación de cargos.

Para fundamentar su actual pedido la defensa sostuvo que el imputado tiene arraigo suficiente en Allen y ofreció una serie de medidas cautelares alternativas a la prisión preventiva, que consideró suficientes para neutralizar los riesgos procesales invocados por la Fiscalía. Propuso así reemplazar la detención por una prohibición de contacto y acercamiento a cualquier testigo de la causa, colocar al imputado un dispositivo de seguimiento electrónico, que el hombre efectúe dos presentaciones diarias en la comisaría y que se le dicte una prohibición de salir de la ciudad.

También solicitó la Defensa que se modifique la calificación legal por una de menor gravedad, planteo que tampoco prosperó.

En la primera audiencia, con los fundamentos que brindó el fiscal del caso Luciano Garrido, el juez Quelín encuadró la imputación contra Ramírez Quezada como presunto coautor del delito de “homicidio calificado por el concurso premeditado de dos o más personas, agravado por el uso de arma de fuego”. En esta audiencia de hoy la Defensa solicitó reducir la calificación a la figura de “homicidio calificado por el uso de arma de fuego”.

A su turno el fiscal Garrido solicitó que se mantengan tanto la prisión preventiva como la calificación legal. Sostuvo que la detención provisoria de Ramírez Quezada es “la única medida idónea para neutralizar los riesgos procesales de fuga y/o entorpecimiento en la investigación” expuestos en la primera audiencia e indicó que “incluso, al día de la fecha, esos riegos procesales se han incrementado”. “Estamos en presencia de un hecho grave, en el que hay más personas involucradas”, señaló el fiscal.

Tras escuchar los fundamentos de las partes, el juez Tobares resolvió confirmar ambas decisiones.

Sobre la calificación legal, señaló que es provisoria y que no cuenta hasta el momento con ningún elemento que permita modificarla.

Sobre la prisión preventiva, en tanto, consideró latente el peligro de obstaculización de la investigación. Valoró la conducta de huida que asumió el hombre imputado tras el hecho y destacó que en el caso existen uno o dos partícipes más, aún no identificados. “En caso de obtener la libertad podría ponerse en contacto con ellos o destruir evidencia. Por otra parte la fiscalía manifiesta que podría haber una influencia sobre los testigos, sumado ello a que el imputado se enfrenta a una expectativa de pena máxima (prisión perpetua) por el delito imputado”, argumentó el juez para convalidar la medida cautelar de detención.

El hecho

De acuerdo con la imputación fiscal, Manriquez Figueroa, de 70 años, se encontraba sentado en el interior de su auto Toyota Corolla, en la calle Misiones, frente al Corralón Municipal de Allen, cuando fue atacado por dos personas. A ese lugar habría sido citado por una tercera persona.

Uno de los presuntos agresores, Ramírez Quezada, habría roto el vidrio del vehículo con una maza y luego habría golpeado con la misma herramienta a la víctima en la cabeza, en al menos dos oportunidades. El otro agresor, no identificado hasta el momento, le habría efectuado a la víctima un disparo de arma de fuego calibre 38 que le impactó en el cuello, provocándole la muerte.

Según la imputación, después de cometer el homicidio los dos hombres se dieron a la fuga juntos, en un vehículo perteneciente al imputado.