Fue en la madrugada del sábado en el balneario El Cóndor. La vecina advirtió a la policía y un uniformado la mandó a dormir.
El llamado telefónico de una vecina para avisar de una fiesta ilegal en El Cóndor generó una respuesta inapropiada de parte de un policía y se realizó una exposición civil en la unidad policial de esa villa marítima.
Las reglamentaciones vigentes establecidas a través del decreto presidencial que regula el movimiento nocturno de 1 a 6 en casi todo el país, ponen a las personas en alerta, sobre todo a aquellas que cumplen a rajatabla las medidas para mantener el sistema sanitario sin saturarse.
Es el caso de Verónica, quien, en la madrugada del sábado llamó a la Comisaría 39 de El Cóndor para dar aviso de una fiesta que se estaba realizando y que no debía hacerse porque estaba prohibida. El primer llamado fue a las 2.48 de la madrugada y la respuesta fue que ya enviaban un móvil.
El segundo llamado de parte de la vecina fue a las 3.19 y era para advertir que a pesar de haber bajado la música seguía estando la concentración de personas en ese lugar. La respuesta del policía fue sorpresiva para la denunciante ya que le dijo: “ya mandamos el móvil, son todos menores de edad y le hicieron bajar la música. Señora, por qué no se va a dormir si ya bajaron la música”.
La Mañana de Cipolletti
