La familia de Karen Álvarez parece no tener respiro, uno de los condenados por la violación y el crimen de la joven realizó un pedido de excarcelación y será evaluado mañana en la justicia. Hay mucha bronca en el entorno de la víctima.
“Hoy nos enteramos. Como a las seis de la tarde nos llamó el abogado, que esta audiencia estaba para mañana a las 11.30. Dijo que la habían avisado hoy, que estas cosas se dan en 24 horas y como parte querellante nos enteramos por nuestro abogado. “Es una locura, tengo bronca, impotencia y ganas de salir a romper todo”.
Carlos Gustavo Mobilio, condenado en el 2017 por la violación y el asesinato Karen Álvarez, en el contexto de femicidio, solicitó el pedido de excarcelación que será evaluado este 11 de diciembre desde las 11.30 de la mañana en el Poder Judicial.
“Va a pedir la excarcelación, o sea va a pedir que lo dejen en libertad. Te pido que me acompañes una vez más, que juntos hagamos saber a los jueces que “NO QUEREMOS FEMICIDAS SUELTOS CAMINANDO ENTRE NOSOSTROS, por eso te espero mañana a Las 11:15 en el poder judicial para alzar nuestras voces”, pidió Edith Miler, mamá de Karen Álvarez a través de la viralización de un mensaje de WhatsApp.
¿Por qué Mobilio puede quedar libre?
La posible excarcelación de Gustavo Mobilio no hace más que generar bronca y confusión en la sociedad. A pesar de haber una condena firme de parte del Superior Tribunal de Justicia de Río Negro, depende de la revisión del caso en la Corte Suprema de Justicia.
El basamento legal se basa en el Pacto de San José de Costa Rica, que indica que ningún detenido puede estar dos años sin sentencia firme. En el año 2014 cambió la doctrina de la Corte Suprema de Justicia y se determinó la “doble instancia”, para que la condena quede firme, por ende, depende de la revisión del caso en la Corte Suprema de Justicia para que definitivamente quede firme la condena a prisión perpetua de Mobilio.
El criterio de la Corte Suprema de Justicia establece que la sentencia quedará firme cada vez que sea revisada por ese órgano judicial nacional, eso implica que puede haber otros casos de la Capital de Río Negro que transiten por la misma senda legal, como el de Ardaiz por el crimen de Lucanera y el de Bernardi condenado por corrupción de menores.
Lo más increíble es que la Corte Suprema de Justicia determina que el mismo juez de primera instancia que determinó la condena inicial a través de la Cámara del Crimen que presidía Bustamante, y con la ratificación del STJ, sea el que aplique esta doctrina y libere al condenados hasta que el fallo quede firme.
La centralización de condenas a través de la Corte Suprema de Justicia no hace más que atentar contra la transparencia que se pretende generar desde la justicia de Río Negro, considerando falta poco tiempo para la instauración de los juicios por jurado con la participación exclusiva de la sociedad, esto no hace más que causar incertidumbre en el funcionamiento de un sistema judicial muy cuestionado de por sí. Después de todo, quien va a querer condenar a una persona que puede quedar libre tres años y medio después porque la causa está cajoneada en la CSJ Nacional.
